Eran los tiempos, otros. Eramos otros.
Lo encontre ayer vale la pena pensarlo para lo que viene.
Afuera los vientos corren hacia el Sur, se dilatan las retinas y crecen las bolsas en los ojos. Una forma de envejecer es asumir que el tiempo que pasa, pasa a destiempo. Afuera son pocos los que salen. Muchos menos los que deciden caminar por la misma vereda a pesar. A pesar de sus pesares. Quisiera no tener miedo, no saberme tan debil. Quisiera saber si la ruta lleva a buen puerto, quisiera saber si lleva a algun puerto, quisiera saber si, parado frente al mar hay alguna puerta.
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